Leila Alaoui, de padre empresario marroquí y madre fotógrafa francesa, nació en París 33 hace años. Vivió en Marrakech y estudió fotografía en la Universidad de Nueva York.
The New York Times y Vogue cuentan con sus colaboraciones. Ha expuesto sus fotografías en medio mundo. Unas fotos que ponen cara a la injusticia y la dignidad. Trabajo en el que sería fácil caer en el retrato pintoresco y condescendiente de nuestro filtro occidental.
Según la fotógrafa, la referencia de su serie Los marroquíes, fue el trabajo de Richard Avedon, In the American West, «por reflejar el orgullo y la dignidad de cada individuo».
Recientemente, ha estado ocupada trabajando en un reportaje sobre mujeres jóvenes casadas a la fuerza, en Burkina Faso, para Amnistía Internacional. El pasado 15 de enero, ella y su chófer –M. Ouédraog, padre de 4 hijos– fueron alcanzados en el mencionado país, por las balas de los integrantes de una franquicia de Al Qaeda. Ese día, fallecieron en el atentado 30 personas, incluido el chófer. Leila lo hizo 3 días después.
Demasiado pronto para una artista con talento, demasiado tarde para tapar el rostro de la dignidad.
Te recomendamos dar un paseo por su web.